La policía de aquel país ha llevado a cabo una serie de detenciones que han desmontado una compleja trama que mantenía “secuestradas” a nueve chicas que creían estar viviendo en la casa de un reality show similar al popular “Gran Hermano” cuando en realidad el objetivo era grabar imágenes y vídeos en los que aparecieran desnudas y subirlas a Internet.
Una lujosa villa de las afueras de Estambul era la “casa de Gran Hermano” en las que estas chicas vivían ajenas a la realidad. Lo que el ojo de este GH ful captaba con interés eran los momentos más íntimos de su cotidianeidad, esos que habitualmente se nos hurta de la programación televisiva.
Momentos en los que estaban desnudas, cambiándose de ropa o en el cuarto de baño, era todo cuanto interesaba a los organizadores de este engaño. Imágenes y vídeos que terminaban en Internet vendiéndose al mejor postor. A ellas se les había contado que participarían en la grabación de un programa que posteriormente se vendería a alguna cadena televisiva para su emisión.
Las chicas no han sufrido ningún tipo de abuso sexual. Se les dijo que debían ir siempre en bikini y ropas ligeras además de participar en un “programa de actividades” que incluía bailes sensuales, juegos en la piscina e incluso peleas entre las participantes.
Para garantizar que no abandonaban la casa se les firmaba un contrato que les penalizaba con una suma de 20.000€ que deberían pagar si salían del Gran Hermano ful antes de transcurridos dos meses.
Más cuidado la próxima vez que te apuntes a un concurso. ─[The Guardian / Imagen: Katie Tegtmeyer]