RESPONSABILIDAD

¿QUÉ VIENE?

Por: Sean Osmin HAMUD RUIZ

Tuve la oportunidad la semana pasada de asistir a la toma de protesta de la actual mesa directiva de CANADEVI. Además de felicitar a su actual presidente, Jesús Cárdenas Alcaraz, quiero compartir una reflexión que surgió de haber escuchado el mensaje del expresidente inmediato anterior, José Francisco Rivas, a quien le pedí permitirme citar parte de su mensaje. Amablemente me dejó hacerlo.

Muchas ideas se pueden resaltar, sin embargo, quiero destacar una de ellas.

Textualmente dijo,

En nuestro estado de Colima existen, de acuerdo con datos del Gobierno del Estado, 234 desarrollos de este tipo, en los que se localizan más de 23,500 lotes y viviendas en la ILEGALIDAD. (esto es más del 10% de todo el parque habitacional existente en el estado)

Ninguno de esos desarrollos, por cierto, fue realizado por algún socio de CANADEVI COLIMA.

Sí fueron, por el contrario, impulsados por Organizaciones Sociales y Partidos Políticos que hoy proponen desde las Tribunas Legislativas del país y del estado, argumentando el derecho a la vivienda que consagra la Constitución de nuestra Nación, iniciativas de ley para legalizar por decreto lo que en el pasado hicieron y hoy permanece a medias y fuera de toda legalidad.

Son estos mismos autores de la ilegalidad habitacional, quienes también están destinando desde el presupuesto federal y recibiendo en sus propias organizaciones, miles de millones de pesos de recursos públicos para arreglar el desastre urbano y patrimonial que generaron”

Vienen las elecciones intermedias, donde tendremos que votar por congresistas locales y diputados federales. Ya lo he dicho en otras ocasiones, pero la cita anterior nos debe mover a no perder el rumbo de lo importante que resultarán estas votaciones.

Vamos a tener la fabulosa oportunidad de intentar nuevamente un cambio, pero ya con el aprendizaje de saber que pensar la elección si tiene sentido. No es castigar. Es decidir con conciencia. Profundizar en el sentido del voto, pues seguimos con el rumbo perdido y el tiempo no está perdonando llegar a la casilla con rencor. Hay que tachar con razón, con responsabilidad.