«Estamos listos. Vamos a organizar el mejor de todos los mundiales», afirmó la presidenta brasileña Dilma Rousseff. Rousseff habló al lado del mandamás del fútbol, Joseph Blatter, después de una reunión de una hora. No se permitieron preguntas durante su rueda de prensa. «Todo se trata de la confianza y confiar en cada uno. La confianza prevalece», expresó Blatter.
Ambos líderes se expresaron ante la preocupación por los retrasos en la construcción de los estadios que albergarán encuentros del Mundial de Brasil 2014. Rousseff visitó la sede de la FIFA antes de acudir al Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, y luego de inaugurar el estadio en Natal, apenas el séptimo de las 12 sedes mundialistas que está lista.
El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, advirtió esta semana que Curitiba no tiene segura su sede por los retrasos en su estadio.