En el mercado de los teléfonos inteligentes, dos contendientes se desprendieron del resto del pelotón: iPhone y Galaxy. El móvil de Samsung Galaxy se incorporó al podio gracias a las buenas prestaciones. Y el tercer aparato de la generación mejora aún más la historia de la familia.
El Galaxy S III cuenta con una pantalla HD Super AMOLED™ de 4.8 pulgadas y el sistema operativo móvil Android™ 4.0 Ice Cream Sandwich. El aparato tiene capacidad para ejecutar múltiples tareas en forma integrada con el procesador dual-core de 1.5 GHz y 2 GB de RAM en combinación con la red 4G LTE de Verizon Wireless.
La capacidad de este «motor» de este aparato permite –sin sobresaltos- mirar un video mientras se chatea con amigos o se navega por Internet con la velocidad 4G LTE a través de Pop Up Play. Pero a esa capacidad de base, Samsung le sumó las siguientes funciones adicionales:
- Smart Stay: la pantalla sólo se oscurece cuando el usuario cierra los ojos o deja de estar frente a la pantalla.
- S Voice™: la función de reconocimiento de voz natural permite controlar las aplicaciones y los servicios más utilizados con palabras en lugar de tocar la pantalla.
- AllShare® Play: el software es un puente para compartir videos en HD y canciones a través del streaming de contenidos multimedia desde el teléfono al televisor Samsung Smart TV® o a un sistema de audio para el hogar compatible (siempre que estén conectados a la misma red Wi-Fi).
- Cámara con Burst Shot: captura instantáneamente 20 imágenes continuas y la función Best Photo selecciona la mejor imagen para mostrar.
- Cámara mejorada de 8 megapíxeles.
- Memoria expandible con tarjeta microSD™.
El Samsung Galaxy S III estaría disponible a partir de julio en los Estados Unidos con un precio de $199.99 y $249.99, para los modelos de 16 GB y 32 GB, respectivamente.
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