Por Balvanero Balderrama García balvanero@gmail.com / @Balvanero.B
Estamos inmersos en temas que nos llaman poderosa, y necesariamente, nuestra atención.
A nivel nacional, la llegada de la primera presidenta en la historia de este país, el debate por la reforma judicial, la propuesta de desaparición de siete organismos autónomos, desastres por huracanes, violencia extendida -pero también focalizada-, por enunciar algunos.
En el ámbito local, destaca la configuración del Congreso, el inicio de las nuevas administraciones municipales, las condiciones de las vialidades urbanas y carreteras, la situación del acceso al puerto y ciudad de Manzanillo, la relación podría incrementarse.
De todo lo anterior, y más, nos enteramos a través de los medios de comunicación, de las redes sociales.
Un tema también relevante, es el de la salud pública y todo lo que ello implica: atención hospitalaria y en consultorios, infraestructura, disponibilidad de medicinas, nuevas modalidades de atención, prevención.
Y ¿cuál es la relación de los derechos de las audiencias con la salud?
La Unicef indica que “en todo el mundo [se] están consumiendo demasiados alimentos ultraprocesados y bebidas no alcohólicas con exceso de grasas saturadas, ácidos grasos trans, azúcares libres, o sal”.
Las tres principales causas de muerte en el país son por enfermedades del corazón, diabetes y tumores malignos (INEGI, 2024). Y un dato que nos ofrece la Dra. Josefina Hernández Téllez, que investiga este tema -entre otros-, es que del 2006 al 2022 la prevalencia de diabetes ha aumentado gradualmente 3.9 por ciento.
Y aquí está la relación. En los medios, principalmente los comerciales, la publicidad sobre estos alimentos conocidos como “chatarra” son promocionados por cuerpos que nada tienen que ver con lo que promocionan. Visualmente atractivos, esta publicidad incentiva al consumo de productos de una manera que evade, elude, enmascara, las consecuencias.
Recientemente se informa que la SCJN analizará un amparo promovido por TV Azteca en contra de las restricciones a la publicidad con sellos de advertencia que busca la protección de niños, niñas y adolescentes (2022). Se argumenta que esto daña el negocio y se agrega, como en otros alegatos, los derechos a la libertad de trabajo y comercio.
Una de las preguntas sería ¿en los medios de comunicación se respetan los derechos de las audiencias todas, no solo en la programación sino en la publicidad?
Nuestro país tiene obesidad, ahí está la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT); se realiza poca actividad física, se puede consultar el Módulo de Práctica Deportiva y Ejercicio Físico (MOPRADEF). Datos que confirman prácticas y hábitos no adecuados.
¿Qué está propiciando muertes por enfermedades que se pueden prevenir y atender adecuadamente, como la diabetes?
El IMSS recomienda que “la modificación de conductas de riesgo y hábitos poco saludables (mala alimentación, tabaquismo, consumo de alcohol, sedentarismo) son claves para llegar a la edad adulta mayor como personas independientes y saludables” (https://www.imss.gob.mx/prensa/archivo/202001/038).
Los Derechos de las Audiencias tienen relación con nuestra salud, tienen vinculación como muchos espacios de nuestra cotidianeidad.
Por ello es importante conocerlos, difundirlos y ejercerlos.