Por Balvanero Balderrama García. balvanero@gmail.com / @Balvanero.B
A nuestr@s fieles difuntos…
porque el recuerdo es presencia
Recientemente participé en un espacio dialógico, de análisis y propuestas a invitación del ICM y Acción Afirmativa.
Cada uno de los términos de su nombre es, en sí mismo, un compendio de significancias: Foro Agenda de las Mujeres 2022-2027.
Foro, remembranza de las plazas públicas en las ciudades-estado de la Grecia clásica, lugar de debate y discusión de los temas importantes para esas sociedades.
Agenda, lo que se proyecta, lo que es importante y se tiene que trabajar, programar y realizar.
Mujeres -casi nada-, más de la mitad de la población en nuestro país, y también en Colima; grupo mayoritario a quienes la minoría les ha escatimado derechos de manera sistemática.
Todo ello junto redimensiona los significados. Es muy importante que la agenda de las mujeres salga de ellas, de sus análisis, de sus experiencias, de su conocimiento, de sus vivencias, de sus intereses, de sus necesidades, de sus requerimientos.
Esa agenda, requerirá, necesariamente, de la participación de todas y también, por supuesto, de todos. Es una reivindicación de derechos, negados y, algunos, aceptados a regañadientes, a fuerza de tesón, de empuje, reclamos y protestas.
Unas impulsando los derechos de todas. Así ha sido, esperemos que cada vez sean más quienes participen con esta consciencia: todos los derechos para todas las personas.
Fui invitado, comentaba, a desgranar los datos más recientes de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, mejor conocida como ENDIREH, del año 2021.
En su quinta edición, esta encuesta es un parteaguas en nuestro país en el estudio sistemático y estadístico de las violencias hacia las mujeres. Se puede hablar de antes y después de la ENDIREH.
Mujeres visionarias, principalmente, impulsaron este ejercicio, con el rigor estadístico que le imprimió el INEGI desde la primera edición en el aparentemente lejano 2003.
Y mujeres, destacadamente de la sociedad civil organizada, la han difundido, impulsado y también cuestionado. Hay un crecimiento evidente, en la cobertura de las violencias desde el 2003 al 2021; ello da cuenta de lo dinámico y complicado de medir este fenómeno social que, de estar entre cuatro paredes, en el ámbito de lo estrictamente privado, la ENDIREH le dio sonoridad, proyección social y estatus de problemática social agravada y de índole público.
Compartí otros temas relacionados, de la ENSU, la ENVIPE, defunciones, población; estadísticas con perspectiva de género.
Quiero, para concluir, compartir unos datos del Censo de Población y Vivienda 2020; la situación conyugal de niñas de 12 a 14 años en el estado de Colima.
El censo registró: 71 en unión libre, 11 separadas, 1 divorciada, 5 viudas, 15 casadas; una taza de 581.2 niñas unidas o alguna vez unidas por cada 100 000 niñas en ese rango de edad, la media nacional fue de 633.1
La importancia del foro+mujeres+agenda en este contexto es más que evidente. Esperemos que los resultados del mismo y otros ejercicios similares que se promuevan, derive en una agenda sólida, que identifique los problemas raíz y ayude a mejorar la condición de la mayoría de la población: las mujeres.
