Colima.- José Martínez Paredes, presidente de la Asociación de Comerciantes Ambulantes “Rey Colimán”, señaló que los vendedores que generalmente se instalan a las afueras de las escuelas en Colima tienen que cambiar de ruta y recorrer las calles de la ciudad ofreciendo sus productos, debido a las vacaciones de verano.
El líder de los ambulantes explicó que en cada escuela hay entre dos y cuatro vendedores que ven disminuidas sus ventas por cinco o seis semanas.
“Disminuyen las ventas porque no hay clases; tan solo de los agremiados, unos 120 comerciantes dejan de percibir ingresos por el receso escolar”, señaló.
Ante esta situación, optan por tomar rutas como ambulantes y recorrer las áreas permitidas de la ciudad, porque el primer cuadro está prohibido, pues ya hay vendedores autorizados.
“Afuera de la clínica 19 del IMSS y del Hospital Universitario están saturando el área; agremiados reportan que a diario llegan a vender tacos tuxpeños, golosinas, tuba, fruta picada, cuando ya hay vendedores autorizados de 10 o 12 años atrás”, explicó.
Sin embargo, Martínez Paredes reconoció que ha faltado energía por parte del Ayuntamiento capitalino para vigilar que en el Centro, hospitales y escuelas “no se metan vendedores sin permiso”.
“Esto causa saturación en espacios como la calle Madero; falta una fuerte inspección para contrarrestar a los vendedores que se meten sin permiso”, consideró.
José Martínez explicó que, como organización, no alientan a que haya más ambulantaje, simplemente defienden los espacios que ya tienen asignados.
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