Ciudad de México.- En 30 años, los mexicanos mayores de 65 pasarán de ser el 7 al 20 por ciento de la población total, informó Luis Miguel Gutiérrez Robledo, director general del Instituto Nacional de Geriatría.
A la par, se estima que el 75 por ciento de los adultos mayores no tienen deterioro que cause discapacidad y 90 por ciento no son totalmente dependientes.
El funcionario señaló que México es el único país que ha avanzado de manera importante en el desarrollo de estrategias focalizadas para atender a las personas adultas mayores de acuerdo con su condición.
Afirmó que el contenido de los trabajos está alineado al plan de acción global que lanzará la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el año 2020, para promover un envejecimiento saludable.
Al encabezar la instalación del Comité de Gestión por Competencias de la Geriatría, que se integró al Sistema Nacional de Competencias, para la certificación de personas con el campo de la geriatría, Gutiérrez Robledo señaló que existen cuatro tipos de personas de la tercera edad, por lo que la atención debe responder a las necesidades de cada grupo.
En primer lugar se encuentran aquellas personas que al envejecer conservan una capacidad intrínseca alta y estable. En segundo lugar están quienes muestran algún deterioro de la capacidad. En tercer sitio, los adultos mayores que se encuentran en franca situación de dependencia y en la última posición, las personas que han sufrido deterioro cognitivo.
Dejó en claro que un nuevo modelo de atención, el desarrollo de recursos humanos, la investigación y una política pública global, son necesarios para hacer frente al reto del envejecimiento poblacional.
En su oportunidad, el director del Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (CONOCER), Alberto Almaguer Rocha, destacó el interés de las instituciones por garantizar que la atención a las personas de la tercera edad cumpla con estándares de calidad.
Entre los objetivos destaca promover el desarrollo y la implantación del Sistema Nacional de Competencias de la Geriatría; definir la agenda de capital humano para la competitividad de la geriatría, así como desarrollar y actualizar Estándares de Competencia (EC), instrumentos de evaluación de competencia y mecanismos de consecuencias que incentiven la certificación de trabajadores de la geriatría.
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