Colima.- Rafael Ortega se convirtió en el triunfador de la primera corrida formal de La Petarera 2010 con 7 toros de la ganadería de Valparaíso.
Este martes torearon tres de los mejores matadores en la actualidad, Rafael Ortega, Eulalio López ‘El Zotoluco’ y Uriel Moreno ‘El Zapata’, además de el rejoneador Jorge Hernández.
Fue hasta en su segundo de toro de la tarde cuando Rafael Ortega hizo gala de su experiencia y maestría con el capote y la muleta.
No fue el toro más grande pero mostró presencia, fuerza y desde los primeros pases, el matador se encontró con el toro y supo llevarlo con el capote y con la muleta, en reiteradas ocasiones pudo realizar pases que fueron ovacionados por el público de la plaza.
Vestido con un traje de luces bañado en oro y con un fondo turquesa, Ortega salió decidió a echarse en la mano al público que llenó La Petatera.
Fue el mejor toro de la tarde y después haber clavado de manera magistral tres pares de banderillas, toreó con maestría y al entrar a matar, dio una estocada perfecta en su primer intentoy el toro Don Ramón de la misma ganadería, se desplomó levantando la ovación del público.
El juez de plaza Alfredo Guicochea le otorgó dos orejas pero el público pidió más y se le concedió también el rabo.
En sus dos toros de la tarde Ortega cortó tres orejas y un rabo, el juez concedió arrastre lento para el toro.
Por su parte Eulalio López ‘El Zotoluco’ no tuvo mucha surte en su primer toro Petros de 494 kilos, que necesito en dos ocasiones de los picadores.
Clavo perfecto los dos pares de banderillas, se empleo bien con el capote y la muleta, pero a la hora de matar no tuvo suerte en su primer intento y en el segundo se quedó cortó por lo que sólo salió al tercio.
Mientras que en su segundo toro de la tarde, Omega de 500 kilos, el segundo más grande de la tarde, se entregó y el publicó le reconoció el esfuerzo, pero a la hora de entrar a matar se volvió a quedar cortó, el juez de plaza no le había otorgado oreja pero por la presión del público se la concedió.
Mientras que Uriel Moreno ‘El Zapata’ levantó grandes expectativas en su primer toro, Viejo Luis, de 510 kilos, el más grande del encierro, en donde se empleo bien con el capote y metió al toro en sus pases.
Clavo de manera perfecta los dos pares de banderillas y se entregó de manera que el público se identificó de inmediato ovacionándole todos sus pases.
Al entrar a matar su estocada fue perfecta lo que provocó que el público se pusiera de pie, el juez le concedió dos orejas.
Sin embargó en su segundo toro de la tarde, no tuvo suerte, el toro duró 23 minutos en salir al ruedo, cuando salió, se mostró indiferente a los pases del matador, se cansó rápido lo que provocó que El Zapata decidiera entrar a matar a los pocos minutos, tampoco tuvo suerte y no culminó lo que parecía una gran tarde para él.
El la corrida también hizo gala del buen rejoneo, el joven Jorge Hernández que con sus tres caballos rejoneó perfecto al primer toro de la tarde, Agaveño de 460 kilos y color crema con una excelente estampa.
Clavo nueve banderillas y sólo falló dos, el juez de plaza le concedió una oreja.
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