Colima.- La tuberculosis es una enfermedad infecciosa que se transmite de una persona a otra, suele ser asintomática en personas sanas y una tercera parte de quienes aún no han enfermado pueden transmitir la infección, de ahí que la vacunación con BCG a niños recién nacidos, así como una vida sana e higiénica son las principales medidas para prevenirla.
Información de la Secretaría de Salud y Bienestar Social indica que las personas infectadas pueden colaborar en la prevención de la misma en otras personas, protegiéndose siempre que tosan con pañuelos desechables, lavarse las manos después de comer y tener una ventilación adecuada en su domicilio.
Los síntomas de la tuberculosis pulmonar activa son tos productiva -a veces con flema y sangre-, dolor torácico, debilidad, pérdida de peso, fiebre y sudoración nocturna. Y cuando la enfermedad tuberculosa se presenta, los síntomas pueden ser leves por prolongados meses, de ahí que los pacientes tarden en buscar atención médica y en este intervalo de tiempo hagan transmisible la bacteria a otras personas.
De acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), las personas infectadas con el bacilo tuberculoso tienen un riesgo a lo largo de la vida de enfermar de tuberculosis en un 10 %, aun cuando este riesgo es mayor para las personas cuyas defensas de su organismo están dañadas, como en los casos de infección por el VIH, desnutrición, diabetes o en quienes fuman.
Al respecto, fumar aumenta el riesgo de padecer tuberculosis y morir como consecuencia de ésta, calculándose que más del 20 % de los casos de tuberculosis en el mundo son atribuibles al tabaco.
En el mundo la tuberculosis es una de las principales causas de mortalidad y, en particular, es una de las cinco causas principales de muerte en las mujeres entre los 15 y los 44 años en el planeta.
La tuberculosis es curable, pero es necesario un diagnóstico temprano porque es una enfermedad grave si no se sigue el tratamiento adecuado y oportuno. BP