La Universidad de Colima y la Beneficencia Pública Federal signaron un convenio del que se derivarán proyectos en beneficio de los estudiantes de nuestra máxima casa de estudios y de la población de escasos recursos que no tiene acceso a servicios de la salud.
La Beneficencia Pública Federal y la Universidad de Colima, a través de su Centro de Desarrollo de la Familia Universitaria (CEDEFU), trabajarán conjuntamente en un programa piloto que podrá replicarse en todo el país.
La Beneficencia Pública, creada en 1861 por el entonces presidente Benito Juárez, cuyo patrimonio es administrado ahora por la Secretaría de Salud, “tiene como propósito generar y canalizar recursos para la atención en salud de aquellas personas que viven en condiciones de pobreza extrema”, según se lee en su portal de internet.
El Rector de la Universidad de Colima, José Eduardo Hernández Nava, destacó que “hoy en día el acceso a oportunidades de bienestar social es un tema indispensable para reducir las brechas de desigualdad que padecemos en el país; en este sentido, la Beneficencia Pública permite otorgar ayuda a personas que así lo requieran, para atenuar sus circunstancias desfavorables”.
En ese tenor de ideas, añadió, y como parte de su responsabilidad social, “la Universidad de Colima se ocupa de incidir positivamente en su entorno, con proyectos que mejoren la calidad de vida de las personas para lograr un bien común”.
“Este convenio, que tendrá vigencia hasta diciembre del 2016, tiene como objetivo trabajar de forma coordinada para potencializar apoyos y recursos en materia de salud y asistencia social a grupos vulnerables que no cuentan con éstos, ya sea de forma directa o a través de proyectos de las organizaciones de la sociedad civil”, añadió el Rector.
El convenio facilitará el intercambio de información en materia de salud y asistencia social, con el fin de crear y actualizar una base de datos del total de personas físicas y organizaciones de la sociedad civil que puedan sumarse a este proyecto. De igual forma, se realizarán, de manera conjunta, programas y actividades de capacitación y asesoría enfocadas en fortalecer el trabajo de ambas instituciones y dar difusión a las actividades que se realicen.
Derivado de ello, se designó al Centro de Desarrollo de la Familia Universitaria como la dependencia encargada de dar atención y seguimiento a las acciones que se realicen a raíz de dicho convenio.
Antes de concluir, Hernández Nava resaltó que “como parte de nuestra responsabilidad social, la Universidad de Colima promueve que los alumnos se involucren activamente en la resolución de los problemas sociales; esto implica que las tareas que emprendamos deben buscar el bienestar común a través de proyectos que ayuden a reducir las brechas sociales y la desigualdad”.
“Estoy convencido que de este convenio se derivarán muchos trabajos benéficos para la sociedad, pues damos un paso más en el cumplimiento de nuestra responsabilidad social, por lo que agradezco y felicito a Socorro García (directora de la Beneficencia Pública) por la disposición que tuvo para trabajar en conjunto con la Universidad de Colima”, concluyó.
Tras la firma del convenio, María del Socorro García Quiroz, directora general de la Beneficencia Pública, tomó la palabra: “Nos congratula que la Universidad de Colima sea piloto en esta materia, con el fin de que los apoyos de la Beneficencia Pública lleguen a quienes los necesiten”.
De igual forma, continuó Socorro García, “con la directora del CEDEFU realizaremos proyectos en beneficio de grupos vulnerables; nos sumaremos a los trabajos del Voluntariado Universitario y los jóvenes se involucrarán en el trabajo social de la beneficencia pública”.
Su idea es que se involucren estudiantes de las áreas de salud, pero también de otras como contabilidad y administración, para que le den seguimiento a quienes se beneficien con lentes, sillas de rueda, aparatos auditivos o prótesis, y saber si realmente les funcionaron o si tuvieron un cambio positivo en sus vidas.
Por último, la directora general de la Beneficencia Pública destacó la importancia de que la Universidad de Colima se una a este proyecto piloto, que puede ser replicado en otros estados: “Creemos que este programa será muy importante para que otras universidades del país también se sumen a la estrategia federal de un “México Incluyente”, la cual tiene que ver con el apoyo a las personas que se encuentren con alguna vulnerabilidad. Estas alianzas beneficiarán a los alumnos de la Universidad de Colima”.
A la firma del convenio asistieron Alicia López de Hernández, presidenta del Voluntariado de la UdeC y directora general del Centro de Desarrollo de la Familia Universitaria; Agustín Lara Esqueda, secretario de Salud, así como Christian Torres Ortiz, secretario y Elías Flores, abogado general de la Universidad de Colima. BP