El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, propuso este martes una reforma constitucional destinada a garantizar el déficit cero, reclamado por Francia y Alemania, y pidió a los partidos políticos que la aprueben antes de las elecciones del 20 de noviembre.
En un discurso ante el Congreso de los Diputados, José Luis Rodríguez Zapatero dijo que esta reforma, que podría ser aprobada «de manera inmediata», permitirá «fortalecer la confianza de la estabilidad a medio y largo plazo en la economía española».
El Gobierno español ha adoptado una serie de medidas para intentar controlar su déficit, mientras el país se encuentra en el centro de la crisis de la deuda que amenaza a la totalidad de la Eurozona. Unos esfuerzos que quisiera darles duración.
«El camino está trazado y cabe confiar en que el gobierno que salga de la urnas, a finales de año, sea del signo que sea, continúe transitándolo en esa dirección», destacó el jefe del Ejecutivo español, que se declaró «preocupado» por el estado de la economía española.
El principal partido de la oposición, el Partido Popular (PP), considerado el favorito para ganar las elecciones anticipadas de noviembre, ya se pronunció a favor de esta reforma constitucional, un apoyo suficiente para que sea aprobado.
Para ser adoptada, esta reforma debe ser aprobada por una mayoría de tres quintos de las dos cámaras parlamentarias. Si lo desean, un décimo al menos de los miembros del Parlamento o del Senado tienen luego 15 días para pedir que la reforma sea sometida a referéndum.
La Constitución española de 1978 sólo fue modificada una vez, en 1992, por el Tratado de Maastricht.
Esta regla para «garantizar la estabilidad presupuestaria» permitirá controlar «tanto con el déficit estructural como la deuda que vinculará a todas las administraciones públicas», explicó Rodríguez Zapatero en su discurso.
El 16 de agosto, Francia y Alemania, propusieron que los 17 países miembros del Eurogrupo adopten antes del verano del 2012 la ‘regla de oro’ que apunta al equilibrio presupuestario, en una reunión destinada a encontrar los medios para reforzar la gobernanza de la Eurozona, empeñada por las deudas abismales de sus miembros.
En Alemania ya fue introducido el principio de control del déficit en la Ley Fundamental, mientras que en Francia, la «regla de oro» dio lugar a un intenso debate entre el partido en el poder y la oposición de izquierda, que se opone, por lo que no es seguro que vaya a ser aprobada.
El presidente del Gobierno español dijo además que España cumplirá este año su objetivo de déficit presupuestario del 6% del PIB.
Las cifras de la primera parte del año «nos ubican claramente en este camino», pero «para estar seguros, el gobierno quiere un margen suplementario», añadió.
Para ello, defendió este martes en el Parlamento el nuevo paquete de medidas anti-crisis adoptado el viernes por el Gobierno, que comprende una reducción del IVA del 8 al 4% para la compra de una vivienda nueva, una reforma del impuesto a las sociedades y la obligación de recurrir a medicamentos genéricos, menos caros.
Estas medidas, que deberían ser votadas el martes en el Parlamento, aportarán al menos 4.900 millones de euros más a las cajas del Estado.
Rodríguez Zapatero anunció que el viernes serán detalladas nuevas medidas en un consejo de ministros extraordinario, que apuntan a flexibilizar el mercado del trabajo, cuando el país soporta un elevado porcentaje de desempleo, superior al 20%.
Las autoridades de Madrid también prevén prolongar seis meses las ayudas de 400 euros mensuales a los desempleados que han agotado las prestaciones.
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, a su llegada este martes al Congreso de los Diputados, en Madrid, donde propuso una reforma constitucional para garantizar la estabilidad presupuestaria.
Con información de AFP