Mark Zuckerberg reconoció el viernes que hasta hace poco Facebook no se esforzaba lo suficiente por vigilar el discurso racista en la red social en Alemania, pero añadió que ha habido avances y que ha escuchado un mensaje «fuerte y claro».
Las autoridades alemanas, inquietas por los insultos racistas que aparecen en las redes sociales cuando el país recibe a cientos de miles de migrantes, las presionan desde hace meses para que los impidan.
Zuckerberg, director gerente de Facebook, habló del asunto con la canciller Angela Merkel y con su jefe de gabinete esta semana en Alemania. El encuentro con Merkel «puso de relieve todo lo que debemos hacer en este país», dijo en una asamblea en Berlín.
«El discurso de odio racial no tiene lugar en Facebook y en nuestra comunidad», dijo. «Creo que hasta hace poco no estábamos haciendo lo suficiente en Alemania, creo que debemos seguir mejorando».
Zuckerberg dijo que está financiando un equipo que colabora con la policía para combatir el discurso racista en Facebook. Dijo que un mejor conocimiento de la ley alemana le ha permitido ampliar su visión de los «grupos protegidos» e «incluir ahora el discurso de odio racial contra los inmigrantes entre las cosas que no toleramos».
«Todavía hay mucho que hacer», dijo. «Queremos hacerlo, pero creo que hemos recibido un mensaje fuerte y claro y nos comprometemos a mejorar». AP